Ke$ha se encuentra en un centro de rehabilitación por transtornos alimenticios, específicamente por la bulimia, por lo cual su madre se ha convertido en su única vocera. Pebe Sebert, mamá de la cantante, contó a la revista ‘People’ que la intérprete estuvo a punto de morir.
‘He visto a mi hermosa hija siendo ridiculizada por sus looks y su peso, al punto de que casi muere. Los médicos me dijeron que el nivel de la presión de su sangre estaba muy bajo, como el de una persona que sufrió un ataque al corazón. Ellos dicen que es un milagro que Ke$ha no haya caído muerta en el escenario’, declaró.
Pebe Sebert agregó que Ke$ha estuvo lidiando con sus inseguridades desde la escuela, pero se intensificaron cuando empezó a trabajar con el productor Dr. Luke y su mánager, cuando apenas tenía 18 años.